No se vayan todavía, aún hay más

Cuando se celebró el pleno donde el equipo de gobierno traía la constitución de una "comisión de investigación", les indiqué que el sitio donde se están investigando los presuntos delitos que puedan implicar a cargos públicos del ayuntamiento de Ibi, se llama Juzgado.

Es en el Juzgado donde desde hace varios años se instruyen varias causas por las diferentes "aventuras" que se han producido desde la casa consistorial. A los efectos de las hipotéticas responsabilidades disciplinarias que se tuvieran que ejercer contra algún funcionario, las penas que se impogan llevan aparejada también la correspondiente inhabilitación para el ejercicio del cargo o función pública. En ese sentido, por tanto, lo que desde una hipotética comisión de investigación pudiera hacerse desde el ayuntamiento, hace ya mucho tiempo que debió de hacerse.

Lógicamente, mientras presidía la corporación quien puso en sus respectivos cargos a todos y cada uno de los concejales que hay imputados en las diferentes causas que se instruyen en el Juzgado de Ibi, esto no solamente no se ponía en marcha, sino que además había varios funcionarios del ayuntamiento directamente a las órdenes de quien presidía la corporación, procurando que todo siguiera convenientemente tapado y ocultado. Reiterar lo que llevamos denunciando desde la oposición hace años es tarea ya estéril.

Pero si la ciudadanía de Ibi cree que con las filtraciones producidas en las últimas semanas de las diligencias de la operación AVE, donde sobre todo se investigan las andanzas del expresidente del partido popular Miguel Ángel Agüera, habíamos visto todo, no desesperéis, como decía Super Ratón al final de sus dibujos animados, "no se vayan todavía, aún hay más". En este caso, mucho más, diría yo.

En el Juzgado de Ibi, además de las diligencias mencionadas, sabemos que se instruyen al menos 2 causas derivadas de la gestión, obras y milagros realizados en el polideportivo. Esas fueron las que en su día comenzaron con todo este vodevil de imputaciones, dimisiones y filtraciones de obras y contrataciones extrañas. Pero como les dije en el pleno, además de esos 2, hay todavía otros tres sumarios en el juzgado de Ibi que prometen. Uno especialmente, que es el relativo a las obras del Teatro Río, donde al parecer se han producido los mayores sobrecostes de la historia de Ibi. Hablamos de más de cuatro millones de euros. En su momento, la instalación de más de 800 butacas por importe de casi 800 euros cada una, triplicando el precio de unas butacas similares o incluso mejores en las que además intervenían al menos seis fabricantes de la localidad, dio muchísimo que hablar.

Pero a nadie se le escapa que en ese Teatro hay otras muchas instalaciones. Si la tónica que se ha seguido ha sido la misma que la de las butacas, es decir, triplicar los precios de mercado, echad cuentas. Todo eso además, bajo la supervisión de un despacho de arquitectos que cobró la friolera de más de setenta millones de las antiguas pesetas por diversos conceptos de honorarios de dirección y supervisión de obra y por los proyectos. Y, lo más divertido, no podía terminar de otro modo siendo un teatro, para terminar entregando una obra que no cumplía la normativa vigente y que ha estado más de dos años abierta al público sin cumplir los requisitos para tener licencia de apertura. Se abre el telón...

P.D. Alberto Fabra, presuntamente president de la Generalitat Valenciana, parece que se ha dado cuenta que si no echa a los imputados de sus escaños, le espera un año en vísperas de elecciones en el que no va a poder presentarse en ningún foro sin ser el pito del sereno. Hoy ya está cesada Angélica Such y parece que es cuestión de horas que Milagrosa Martínez se vaya a hacer muchas puñetas. Tarde, muy tarde señor president...