Última entrevista en Radio Ibi correspondiente al 10 de ABRIL del año 2015

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jueves, 16 de febrero de 2012

Bien por Alain Afflelou



Ayer por la tarde el diario el Mundo digital publicaba la noticia de que el conocido empresario y óptico Alain Afflelou decidía retirar su publicidad de canal PLUS por la polémica de los guiñoles. Pinchando AQUÍ podéis acceder a la noticia completa. Alain Affelou es además uno de los patrocinadores más importantes de Roland Garrós.

A estas alturas, creo que no habrá ningún ciudadano que no esté al tanto de la polémica organizada por nuestros vecinos franceses, al hilo de la sanción por doping del TAS contra Alberto contador, y los vídeos "cómicos" de los muñecos del guiñol franceses, uno de los programas estrella de canal plus. La crítica satírica es y espero seguirá siendo uno de los grandes recursos para entretener y también denunciar los abusos, las corruptelas, retratar la crónica social, de actualidad y política de cualquier país. En España hemos tenido ejemplos de todo tipo, y en televisión, hay dos programas que se han hecho archiconocidos a pesar de la censura a la que desde nuestra comunidad se somete a la TV3, como son CRACKÒVIA y POLONIA. En el primero se hace crítica y cachondeíto de la actualidad sobre deportiva, abundando mayoritariamente en el Barça y el Madrid y, un poquito menos, sobre el Espanyol. Los sketch sobre la presunta "escasa inteligencia" de Sergio Ramos, o los que versan sobre la afición a las fiestas y a la juerga de Guti, han sido archiconocidos e imagino que a los afectados no les habrán hecho ni puñetera gracia. Eso es al final la sátira, exagerar deliberadamente el carácter, las aficiones o los defectos de una persona para provocar hilaridad.



Sin pretender justificar la escasa gracia del uso que los guiñoles del canal plus francés han hecho sobre el presunto doping generalizado que pretender atribuir al deporte español, soy de la opinión que nosotros jamás lo veremos objetivamente. Somos españoles y no nos hace ni puñetera gracia que, para algo en lo que destacamos y ganamos, pretendan atribuirlo a abuso de sustancias, máxime cuando nuestros deportistas pasan los controles que tocan y cuando tocan. Si es que ni un mundial nos van a dejar disfrutar. Este año, si Nadal vuelve a llegar a la final de Roland Garrós y ganarla, 45 millones de españoles haremos una pedorreta descomunal a nuestros vecinos franceses, pero seguro que Nadal vuelve a guardar las formas. Eso nos daría más gusto que meterles cien querellas por atentar presuntamente contra el honor.

La realidad es que una parte de de franceses no nos pueden ni ver, siguen teniendo la imagen de España como un país inferior, de tercera división. Siguen sin soportar que en los últimos años nos hayamos acercado a su nivel económico. Que seamos una de sus principales fuentes de ingresos por turismo siendo la tercera o cuarta nacionalidad que más visita su país. Que tengan que venir a nuestro país a buscar el sol y seguramente otra media docena más de complejos que están y estarán, porque caer bien o mal es algo innato. Y a los franceses, en general, les caemos mal, y ellos a nosotros, en general, pues también, para qué nos vamos a engañar. Es lo que suele suceder entre vecinos. Yo lo que pienso es que mucha de esa tontería se cura viajando. No en vano, el chauvinismo es de origen francés, pero chauvinistas los hay en todas partes, y también España está repleta de ultras de todo pelaje, que se creen que sus pedos huelen a vainilla a diferencia que los del resto.

Pero Francia ha sido la cuna de la revolución que sin duda cambió el mundo occidental, de Rousseau, Diderot, Voltaire, Descartes, de la declaración de los derechos del hombre y del ciudadano y de infinidad de cosas, además de ser un país increiblemente bello, que la hacen una de las grandes naciones del mundo. En esa gran nación, también hay algún francés que se salva, aunque sea por visión empresarial y de negocios seguramente y, como muestra, el de las gafas del tchin-tchin, en un alarde de dignidad dice que retira la publicidad, que es donde más duele y eso sí, la pela es la pela. No tengo gafas de su marca pero seguro que en España este tío vendía un montón y esto le granjeará alguna simpatía y muchos pares de gafas vendidos.

3 comentarios:

  1. Una polémica estéril,me parece a mí. El humor y la parodia es eso: humor y parodia. Que el Sr.Wert les haya entrado al trapo indica el poco sentido del humor de este hombre, y ya sabemos que el sentido del humor (poco o mucho) va parejo al nivel intelectual de las personas. Cuanto más sentido del humor, más nivel intelectual.

    A mí siempre me hicieron gracia los guiñoles, aquí y en Francia.

    Y eso de que nos tienen tirria.... ¿eso es así o es uno más de los estereotipos que tenemos en la memoria colectiva que son falsos?

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  2. No deja de sorprenderme la repercusión que puede llegar a tener lo que digan o hagan cuatro muñecos en una televisión francesa. Por mucho que lo intente, no me imagino a los franceses cabreados con Tip y Coll a consecuencia de aquel sketch en el que explicaban (en blanco y negro), la forma de llenar un vaso de agua. La ironía y la parodia cada vez están más cuestionadas. Me parece que sobra fundamentalismo.

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  3. Efectivamente, una parte de los franceses nos tratan con aire de superioridad, pero algo parecido sucedía con los madrileños que venían a veranear a nuestras costas y cuando oían hablar en valenciano soltaban aquello de "hable en cristiano". Pues eso, que es cuestión de respeto, de viajar y de no ser extremistas . Nadal, por cierto , ha sido siempre un ejemplo de educación y respeto.
    Tofol

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