Al límite (una de cine)

Imagino que un fin de semana largo como el que tenemos por delante, dará a muchos la posibilidad de acercarse al cine. E imagino también que esta película, es una de las que muchos puede que se planteen ver. Es la típica película en la que el gancho principal es el actor protagonista, ya que Mel Gibson es una de esas estrellas que no suelen fallar en taquilla, con resultados aceptables en unos casos y meramente comerciales en otro. Mel Gibson ya sabéis que también es de los que despiertan odios o adhesiones incondicionales, por su posicionamiento ideológico. A mi, sinceramente la ideología de un actor o actriz, me suele importar más bien poco, mientras haga bien su trabajo. Y reconozco que disfruté con Braveheart y es una de las películas que revisito constantemente, de las de comer palomitas y sentarse casi tres horas en el sofá .

Acudí a ver "Al límite" siguiendo la recomendación de un familiar. Debo reconocer que no colmó mis expectativas. Con esto, no pretendo frenar a nadie a que vaya a verla. Cuenta, como todas las producciones americanas en la que intervienen "superestrellas", con un buen despliegue de medios, cuidadísima producción, una historia que quiere mantener la intriga hasta el final. Pero también cuenta con algunos de los vicios de los que adolecen muchas producciones destinadas a hacer taquilla únicamente. En mi opinión, la película mantiene una "falsa intriga", ya que el final y el desenlace se sospecha desde el comienzo, que es lo mejor de la película y que hacía prometer mucho más, pero luego decae. Es sosa a ratos. No acaba de entretener, que es lo mínimo que puede pedírsele a una película con tal despliegue de medios. Y tiene "trampas" al mogollón, que como recurso no está mal, pero en este caso se abusa en mi opinión. Como contrapunto, supone una crítica a las grandes compañías que no tienen escrúpulos, pero muy velada. Y transmite, una vez más, que la podredumbre, los asuntos turbios y la corrupción llegan a todos los ámbitos. Esto último les sonará. Y por supuesto, tratándose del protagonista de toda la saga de arma letal, el mensaje del poli justiciero es el que preside el film.

Así y todo, se puede ver, pero a mí no me satisfizo. Espero no haberos chafado las ganas de acudir, pero me sabría mal crear falsas expectativas. Quizá creando menos expectativas a lo mejor os queda un buen sabor de boca. Como no soy crítico de cine ni lo pretendo, esto es sólo una opinión. Es lo que hay. Feliz puente