
El pasado 13 de enero, el diario INFORMACIÓN publicaba la relación de visitantes a los diferentes museos a la vecina localidad de Alcoy. Pincha AQUÍ para leer la noticia completa. Me llamaban la atención varios datos, uno el dato de que 20.724 personas eran el total de visitantes que habían recibido los diferentes museos de la vecina ciudad, que cuenta con una oferta interesante y en la que se han hecho inversiones millonarias en la última década.
Cuando digo que me llamaba la atención, era por lo escaso del número lógicamente y más si lo comparamos en proporción a la inversión recibida. Especialmente llamativa me resultaba la cifra "espectacular" de 3500 personas del museo de bomberos, si bien hay que destacar el hecho de que esta infraestructura se inauguró el 9 de junio. Lejos de polemizar con nuestros vecinos con los que nos unen lazos de amistad, empresariales y con los que compartimos algunas tradiciones, lo que quiero poner de manifiesto es el interés que las diferentes administraciones se han tomado con la ciudad vecina y cabecera de comarca, y EL TOTAL DESINTERÉS que hay en Ibi por esas mismas autoridades y también por entidades privadas, como ha sido la CAM y su obra social.
En el museo de la Fiesta de Alcoy se invirtieron más de dos millones de euros en su momento. En el museo de bomberos, nada menos que seis millones de euros y en el centro de arte contemporáneo ubicado en la antigua sede social de la CAM en Alcoy (CADA), impulsada por consellería y la CAM, ha sido de 3'5 millones de euros solamente para el acondicionamiento del edificio, que además en la actualidad está cerrado y a la espera de ver qué se hace con él. A nadie se le escapa que en Ibi, donde hay una mayoría de gente emprendedora, ahorradora y trabajadora, la CAM ha hecho muchísimo dinero a lo largo de su historia, pero las inversiones de su obra social, a la vista está, no han sido proporcionales al negocio que los ibenses les han dado.
La comparación con la atención que ha recibido el museo del Juguete, por parte de esas mismas instituciones: Consellería, Diputación y CAM, ha sido perfectamente manifiesta y la situación es para que nuestra alcaldesa en lugar de dedicarse a despotricar contra Cataluña y los catalanes en sus intervenciones en las Cortes, estuviese un día sí y otro también denunciando el agravio. La comparación resulta aún más sangrante, si observamos que nuestro museo fue durante varios años el más visitado de la provincia de Alicante (hasta la apertura del MUBAG en Alicante capital), con más de 15.000 visitantes anuales, que triplican y hasta quintuplican las recibidas por cualquiera de los museos de Alcoy.
Y la situación es esta: Consellería, cotitular de la fundación museo Valenciano del Juguete junto con el Ayuntamiento de Ibi y la CAM, pasa olímpicamente de Ibi, del Museo, de la Alcaldesa, de los ibenses y de las decenas de empresas jugueteras que cedieron de buena fe sus colecciones. A las dos empleadas del museo se les viene amenazando con echarlas a la calle. La antigua sede de la Casa Gran, donde contra viento y marea se hizo un digno museo que recibió el número de visitantes antes indicado, ha estado cerrada durante tres años. El nuevo museo, para el que se ha hecho una inversión ridícula en comparación con las recibidas por los de nuestra ciudad vecina, cerrado y sin plan de actuación, porque ahora hay que dotarlo de medios y personal para abrirlo. Y nuestra alcaldesa preocupada por lo malos que son Cataluña y los catalanes y despotricando en el último pleno, una vez más, de Zapatero. Pues eso, que pintamos bien poco. Lo más triste es que el museo del Juguete, con una inversión adecuada que no vino en época de vacas gordas, tenía y tiene un potencial tremendo y sería un foco de visitantes y por tanto de riqueza y creación de empleo para nuestra población.
Cuando digo que me llamaba la atención, era por lo escaso del número lógicamente y más si lo comparamos en proporción a la inversión recibida. Especialmente llamativa me resultaba la cifra "espectacular" de 3500 personas del museo de bomberos, si bien hay que destacar el hecho de que esta infraestructura se inauguró el 9 de junio. Lejos de polemizar con nuestros vecinos con los que nos unen lazos de amistad, empresariales y con los que compartimos algunas tradiciones, lo que quiero poner de manifiesto es el interés que las diferentes administraciones se han tomado con la ciudad vecina y cabecera de comarca, y EL TOTAL DESINTERÉS que hay en Ibi por esas mismas autoridades y también por entidades privadas, como ha sido la CAM y su obra social.
En el museo de la Fiesta de Alcoy se invirtieron más de dos millones de euros en su momento. En el museo de bomberos, nada menos que seis millones de euros y en el centro de arte contemporáneo ubicado en la antigua sede social de la CAM en Alcoy (CADA), impulsada por consellería y la CAM, ha sido de 3'5 millones de euros solamente para el acondicionamiento del edificio, que además en la actualidad está cerrado y a la espera de ver qué se hace con él. A nadie se le escapa que en Ibi, donde hay una mayoría de gente emprendedora, ahorradora y trabajadora, la CAM ha hecho muchísimo dinero a lo largo de su historia, pero las inversiones de su obra social, a la vista está, no han sido proporcionales al negocio que los ibenses les han dado.
La comparación con la atención que ha recibido el museo del Juguete, por parte de esas mismas instituciones: Consellería, Diputación y CAM, ha sido perfectamente manifiesta y la situación es para que nuestra alcaldesa en lugar de dedicarse a despotricar contra Cataluña y los catalanes en sus intervenciones en las Cortes, estuviese un día sí y otro también denunciando el agravio. La comparación resulta aún más sangrante, si observamos que nuestro museo fue durante varios años el más visitado de la provincia de Alicante (hasta la apertura del MUBAG en Alicante capital), con más de 15.000 visitantes anuales, que triplican y hasta quintuplican las recibidas por cualquiera de los museos de Alcoy.
Y la situación es esta: Consellería, cotitular de la fundación museo Valenciano del Juguete junto con el Ayuntamiento de Ibi y la CAM, pasa olímpicamente de Ibi, del Museo, de la Alcaldesa, de los ibenses y de las decenas de empresas jugueteras que cedieron de buena fe sus colecciones. A las dos empleadas del museo se les viene amenazando con echarlas a la calle. La antigua sede de la Casa Gran, donde contra viento y marea se hizo un digno museo que recibió el número de visitantes antes indicado, ha estado cerrada durante tres años. El nuevo museo, para el que se ha hecho una inversión ridícula en comparación con las recibidas por los de nuestra ciudad vecina, cerrado y sin plan de actuación, porque ahora hay que dotarlo de medios y personal para abrirlo. Y nuestra alcaldesa preocupada por lo malos que son Cataluña y los catalanes y despotricando en el último pleno, una vez más, de Zapatero. Pues eso, que pintamos bien poco. Lo más triste es que el museo del Juguete, con una inversión adecuada que no vino en época de vacas gordas, tenía y tiene un potencial tremendo y sería un foco de visitantes y por tanto de riqueza y creación de empleo para nuestra población.