El cambio horario en Ibi

El título de la entrada del blog de hoy puede induciros a pensar que voy a hablar del cambio de uso horario que el último sábado de octubre, como cada año, entrará en vigor en todo nuestro país. Nada más lejos de la realidad. El cambio horario iberut es el provocado por el cambio en la situación del ayuntamiento. Y hoy, mira tú por dónde, la alcaldesa ya ha convocado el pleno el primer lunes de mes y, eso sí, a las 19 horas, conforme está previsto en el reglamento aprobado por unanimidad a principios de legislatura.

En el último pleno, quien preside -de momento- nuestra corporación, tras pasarse por el forro por enésima vez la normativa que todos nos habíamos dado, y haber convocado en el pleno fuera del día y la hora previstos, y tras levantarse Juan Valls del mismo por sentirse engañado públicamente por quien se había comprometido simplemente a cumplir la normativa, nos soltó un rollo patatero sobre por qué convocaba los plenos una hora antes. Ella, que junto con media docena de sus compañeros tienen dedicación exclusiva y cobran por ello, intentó convencernos, átame esa mosca por el rabo, que el adelantar los plenos no era fruto de su capricho, que era para algo así como intentar conciliar la vida laboral y familiar. Y pretendía convencer a Yolanda Venteo, en su condición de mujer, que ella precisamente mejor que nadie debía entenderlo.

¿Pero se puede ser más farsante, más hipócrita y más desvergonzada? Una parte importante de los miembros de la corporación, entre los que me incluyo, tenemos familia con niños pequeños, tenemos negocios y tenemos, lógicamente, vida privada. Una de las partes más fastidiosas de esto de la política es precisamente la renuncia a pasar mucho tiempo con nuestra familia, nuestros amigos y, en muchos casos, la complicación de vida profesional que te puede suponer en un momento dado. Lo anterior es obvio. Eso, todos y cada uno de los que decidimos presentarnos en una lista electoral, lo tenemos o deberíamos de tener muy claro y muy pensado. Las circunstancias personales de cada uno/a son eso, personales. Si la excusa para adelantar los plenos de las 19 horas a las 18 es esa, sinceramente no cuela. Entre otras cosas, porque gran parte de los plenos importantes de la pasada legislatura, y alguno de esta, se han convocado nada menos que un viernes a las 12, fastidiando así especialmente a los concejales que no tenemos dedicación exclusiva y que somos mayoría y sin pensar para nada en la conciliación de la vida laboral ni familiar

Si la alcaldesa ha venido convocando los plenos cuándo y cómo le ha rotado, ha sido para, a pesar de su condición de mayoría minoritaria, seguir recordándonos que ella es la que manda y decide. Como en todo lo demás. En el Ayuntamiento no se mueve ni una mota de polvo sin el control, consentimiento y bendición de la primera edil. Por eso ha estado todo absolutamente parado a conciencia (museo del juguete, bajada del IBI, ambulancia, etc, etc) siguiendo órdenes de la primera edil. Por eso sus compañeros concejales que lo han consentido y permitido, serán ahora tan responsables como la primera edil, de que pueda llegar una moción de censura si al final llega. Por eso, por no saber conciliar la responsabilidad de ser la alcaldesa de todos, puede dejar de serlo en breve. Por eso, hoy podría ser el último pleno que presida (o el penúltimo) quien ha maldirigido los destinos de Ibi durante diez años. La soberbia, la falta de responsabilidad y la imposición permanente no pueden ni deben de quedar impunes. Es la hora del verdadero cambio horario en Ibi