Corría el 13 de enero de 1991. Los periódicos de toda España se desayunaban con el anuncio de la dimisión de Alfonso Guerra, vicepresidente del gobierno. ¿Os acordáis? Gobernaba entonces el partido socialista. A diferencia de lo que al parecer se avecina en los próximos meses, en aquella época era el Psoe el partido que tenía poder absoluto en el Gobierno Central, y que gobernaba en la mayoría de autonomías, incluida la nuestra.
En aquellos años, Alfonso Guerra, era el sumo hacedor del PSOE, responsable principal de todas las campañas electorales y del control férreo dentro del partido. Pero cuando hay mucho poder absoluto y ejercido durante muchos años, invariablemente aparecen las tentaciones, los falsos amigos, la gente que busca medrar. Y fue entonces cuando saltó el escándalo del hermano del mentado vicepresidente del gobierno, Juan Guerra, quien al parecer tenía un "despachito" habilitado en la Junta de Andalucía por el que desfilaban todos los que buscaban acercarse al gobierno buscando contratos, favores, subvenciones o a saber qué. El cachondeo de Juan Guerra entrevistado por Mercedes Milá, tratando de explicar lo de los "cafelitos", que según él iban a tomarse allí provocó la caída del anteriormente mentado Alfonso Guerra y el inicio de la caída del entonces todopoderoso PSOE. Luego ya saben, vino lo de Mariano Rubio, Roldán, y otras cuestiones, además del lógico deseo de alternancia que se produce en cualquier sociedad democrática, que propiciaron el acceso al poder de José María Aznar en 1996.
Parece que fue ayer, pero ya fue antesdeayer, y ahora nos encontramos además de todo el escándalo de la trama Gürtel, que ha costado el cargo nada menos que al presidente de la Generalitat Valenciana, la imputación del hermano de la alcaldesa de Alicante, donde presuntamente y según publican los medios de comunicación, se gestionaban muchos de los asuntos relacionados con el urbanismo alicantino. La alcaldesa de Alicante ganó las elecciones por mayoría aplastante hace solamente unos meses. Junto con ella, Alperi, que fue su mentor también están siendo investigados en relación con este tema y por el caso Brugal. La alcaldesa de Alicante es también diputada en las Cortes Valencianas. La investigación del hermano del entonces vicepresidente del gobierno, Juan Guerra, le costó la dimisión a Alfonso Guerra. Después de que Camps haya sido obligado a dimitir por su jefe, Mariano Rajoy, según decían por un "asuntillo de unos trajes", qué sucederá con la alcaldesa de Alicante?
A mí, como a la mayoría de ciudadanos, nos da igual el color político del presunto compadreo, chanchulleo, corrupción o actividad delictiva. El que la haga que la pague, y que se exijan responsabilidades judiciales y políticas. Mariano Rajoy, según todas las encuestas puede ganar las elecciones dentro de mes y medio, pero a diferencia de Aznar cuando accedió al poder, ahora ya hay muchas autonomías donde su partido gobierna hace más de dieciséis años, donde hay más sombras que luces y donde los Gürtel y/o los Brugal, hacen que la administración y sus responsables apesten para muchos ciudadanos. O pone orden, o su credibilidad en la intención de "regenerar" la democracia estará en solfa.
En aquellos años, Alfonso Guerra, era el sumo hacedor del PSOE, responsable principal de todas las campañas electorales y del control férreo dentro del partido. Pero cuando hay mucho poder absoluto y ejercido durante muchos años, invariablemente aparecen las tentaciones, los falsos amigos, la gente que busca medrar. Y fue entonces cuando saltó el escándalo del hermano del mentado vicepresidente del gobierno, Juan Guerra, quien al parecer tenía un "despachito" habilitado en la Junta de Andalucía por el que desfilaban todos los que buscaban acercarse al gobierno buscando contratos, favores, subvenciones o a saber qué. El cachondeo de Juan Guerra entrevistado por Mercedes Milá, tratando de explicar lo de los "cafelitos", que según él iban a tomarse allí provocó la caída del anteriormente mentado Alfonso Guerra y el inicio de la caída del entonces todopoderoso PSOE. Luego ya saben, vino lo de Mariano Rubio, Roldán, y otras cuestiones, además del lógico deseo de alternancia que se produce en cualquier sociedad democrática, que propiciaron el acceso al poder de José María Aznar en 1996.
Parece que fue ayer, pero ya fue antesdeayer, y ahora nos encontramos además de todo el escándalo de la trama Gürtel, que ha costado el cargo nada menos que al presidente de la Generalitat Valenciana, la imputación del hermano de la alcaldesa de Alicante, donde presuntamente y según publican los medios de comunicación, se gestionaban muchos de los asuntos relacionados con el urbanismo alicantino. La alcaldesa de Alicante ganó las elecciones por mayoría aplastante hace solamente unos meses. Junto con ella, Alperi, que fue su mentor también están siendo investigados en relación con este tema y por el caso Brugal. La alcaldesa de Alicante es también diputada en las Cortes Valencianas. La investigación del hermano del entonces vicepresidente del gobierno, Juan Guerra, le costó la dimisión a Alfonso Guerra. Después de que Camps haya sido obligado a dimitir por su jefe, Mariano Rajoy, según decían por un "asuntillo de unos trajes", qué sucederá con la alcaldesa de Alicante?
A mí, como a la mayoría de ciudadanos, nos da igual el color político del presunto compadreo, chanchulleo, corrupción o actividad delictiva. El que la haga que la pague, y que se exijan responsabilidades judiciales y políticas. Mariano Rajoy, según todas las encuestas puede ganar las elecciones dentro de mes y medio, pero a diferencia de Aznar cuando accedió al poder, ahora ya hay muchas autonomías donde su partido gobierna hace más de dieciséis años, donde hay más sombras que luces y donde los Gürtel y/o los Brugal, hacen que la administración y sus responsables apesten para muchos ciudadanos. O pone orden, o su credibilidad en la intención de "regenerar" la democracia estará en solfa.
Facilitas adecuadamente la información, Alfonso Guerra tuvo que dimitir por las sospechas hacia su hermano, sospechas que nunca se sustanciaron en ningún juzgado.
ResponderEliminarEl tema "Brugal" o el tema "Gürtel" sí están en los juzgados. Alfonso Guerra dimitió sin estar imputado. Francisco Camps ha dimitido en vísperas de ser juzgado, y sólo lo hizo cuando su partido lo puso contra la espada y la pared (o dimites o aceptas la culpabilidad). No es ni parecido.
Por mucho menos que lo que está apareciendo de Sonia Castedo dimitió Alfonso Guerra, esta señora se agarra al sillón y encima denuncia que está siendo víctima de una campaña de desprestigio. A ver si ahora va a ser delito denunciar las investigaciones abiertas por un presunto delito de prevaricación, y los detalles de estas investigaciones.
Para mí la moralidad de unos y otros se refleja muy bien en estos casos.
El proceso vivido por la sociedad española desde lo del "hermanísimo" de Guerra hasta el Brugal demuestra que la ciudadanía ha llegado al máximo en su capacidad de asombro. Ya no se escandalizan como antes, ya parece asumido (espero que sea una exageración mía) que todos son iguales y que todos son corruptos. Así las cosas, la supervivencia de los partidos depende de un buen marketing, que haga creer a los votantes que un burro vuela.
ResponderEliminarLo que se está publicando estos días sobre el hermano de la alcaldesa de Alicante, sería para que esta última y su padrino Alperi hubieran dimitido hasta de la asociación de antiguos alumnos del colegio. Y mientras tanto, ahí siguen, una de alcaldesa y diputada, otro también de diputado, la hija de este último de directora territorial de urbanismo. Esto es como poner el zorro a cuidar de las gallinas
ResponderEliminarRamón