Crear empleo en Ibi

En el pleno del pasado mes de abril, hace ya más de cuarenta días, pregunté al concejal responsable de comunicación del Ayuntamiento o a quien correspondiera, por el coste del boletín-panfleto "+IBI", distribuido días antes por todos los domicilios de la localidad, así como por si el mismo había sido encargado a alguna de las empresas que en nuestra localidad se dedican a las Artes Gráficas.

La respuesta que ofreció Juanjo Santoyo, fue que el coste había sido mucho menor de lo que podría haber sido y que por escrito me detallaría el mismo. Ni una sola palabra sobre la empresa a la que se encargó. A la vista está, que si se hubiese encargado a una empresa de Ibi, la respuesta habría sido inmediata. Como pueden imaginarse, transcurrido más de un mes, no he tenido tampoco respuesta por escrito, como a tantas y tantas cuestiones esta legislatura.

Lo anterior, más allá de la manipulación que supone tener un boletín "deformativo" que no informativo, municipal, y que no se diferencia en nada de la media docena de folletos que el pp les ha repartido en nuestros domicilios, unos pagados con cargo al erario público y otros por el propio partido gobernante, pone de manifiesto la sangrante preocupación que supone para la ciudadanía ibense, observar como la gran mayoría de trabajos pequeños, medianos y sobre todo grandes, se han venido adjudicando en su gran mayoría a empresas de fuera de la localidad, dejando pasar la ocasión de crear riqueza y empleo en Ibi, que en esta coyuntura y en cualquiera, debería ser la preocupación de cualquier gobernante.

Para ADIi esta es la principal ocupación y preocupación que el gobierno entrante va a tener la próxima legislatura y desde nuestro grupo, aportamos nuestras ideas para que crear empleo, generar tráfico económico que de actividad, trabajo y riqueza a las empresas, comercios y trabajadores de Ibi en situación de desempleo sea la finalidad última de todas las políticas dirigidas desde nuestro Ayuntamiento. Es uno de los ejes de nuestro programa electoral. En este sentido, hay que dar la posibilidad a que las empresas de Ibi puedan entrar en todas las contratas municipales. En la actualidad, y en contra de lo que los grupos de la oposición hemos venido solicitando, se han confeccionado la mayoría de las obras del plan "E" y del plan "Confianza", de modo y manera que impedían acceder ni siquiera a muchas empresas de nuestro pueblo del ramo de la construcción, la electricidad, la carpintería, etcétera. En suma, no solamente se han adjudicado a empresas de fuera, sino que se ha perjudicado directamente a empresas de Ibi.

En los pequeños contratos o adjudicaciones libres, lo único que ha primado ha sido los criterios de afinidad política o parentesco con algún importante concejal del equipo de gobierno. Así, hemos visto como cientos de miles de euros han sido sistemáticamente adjudicados a media docena de empresas con estrechos vínculos con miembros del equipo de gobierno. Debe de confeccionarse una bolsa de contratación donde en igualdad de condiciones, puedan rotar todas las empresas de Ibi con el cumplimiento lógico de un mínimo de objetivos. Desde las artes gráficas, a cualquier tipo de servicios. Por otra parte, el bloqueo del millón doscientos mil metros del polígono Alfaç IV, ha sido una de las grandes asignaturas pendientes. No valen excusas. Un alcalde debe poner en valor la situación de Ibi en el eje mediterráneo, comunicado por autovía con toda España, a media hora del puerto y el Aeropuerto de Alicante y muy pronto, del AVE. Facilitar suelo a precios competitivos (no especulativos) a las empresas de Ibi que lo precisen, y buscar empresas que generen empleo y aporten valor añadido a nuestro parque empresarial, debe de ser ahora mismo, la principal preocupación de un alcalde. Más de tres mil parados en Ibi, y muchas pequeñas y medianas industrias y comercios esperan propuestas y resultados. Atacar a los partidos de la oposición no maquillará la nefasta actuación de unos gobernantes que han perdido una legislatura entera en cuitas internas, pleitos, amenazas, expulsiones e insultos a los rivales políticos.